Tal y como llevamos años manteniendo, la inspección previa al tratamiento de una plaga es un factor muy importante a la hora de favorecer el éxito del mismo. De este modo, seguimos invirtiendo en material que nos permite una mejor detección y valoración; cámaras termográficas, detectores acústicos, endoscopios con cámara de inspección, higrómetros, polímetros, data-loggers…
A la hora del tratamiento siempre apostamos por el método más efectivo y que deje un menor residuo. La Cámara de Shock Térmico lleva más de 15 años siendo la solución para las piezas móviles, pero para las piezas fijas eran necesarios tratamientos químicos. Ahora disponemos de un sistema de tratamiento por ondas que nos permite realizar el tratamiento in situ, con residuo 0. Este sistema es el resultado de años de investigación llevada a cabo en cooperación con el IROE y CNR. Es un tratamiento que se realiza in situ, eficaz, ecológico y no invasivo. El sistema, alimentado con alta tensión, emite unas ondas dirigidas que absorbe la madera en un proceso denominado “calentamiento dieléctrico”. Con este sistema se alcanzan temperaturas de 65 ºC, letales para cualquier fase del ciclo vital de los insectos.